La compra de estupefacientes por Internet, en particular, a través de la deep web es un fenómeno que si bien en un principio pocos sabían o se atrevían a experimentar, actualmente ha llegado al mainstream a través de las historias e investigaciones de arrestos de alto perfil como también lo fue Silk Road, cuyo creador, Ross Ulbricht, fue arrestado y condenado casi un mes antes del arresto de Maximilian.
Maximilian no era más que un chico alemán de tan sólo 17 años que creó un sitio de ventas en la clearnet, es decir, el Internet que usamos día con día para navegar. Según la entrevista con Vice, él se enfocó en crear una página web que le diera importancia a la experiencia del usuario, al tiempo que utilizaba las ventajas del blockchain y la compra venta en Internet por medio de bitcoins para encubrir tanto su identidad como la de sus compradores.
Netflix está desarrolló una serie inspirada en su caso. / Foto: Netflix.
El nombre de su tienda era Shiny Flakes, la cual tenía un amplio repertorio de estupefacientes sintéticos, incluso contaba con una plataforma que hacía sugerencias con base en el tipo de droga que se compraba o consultaba, lo cual es evidencia del enfoque de Maximilian. El sitio web estuvo en operación poco más de un año hasta que en 2015 fue arrestado, tras haber comerciado con estupefacientes a nivel mundial, por ejemplo, Vice indica que también llegó a expedir mercancía a Indonesia, aunque su mercado principal se encontraba en Alemania y Europa.
Pronto, Maximilian, quien es descrito como un nerd que no salía de su habitación, traficó hasta 320 kilogramos de estupefacientes con un valor de 4.1 millones de euros, es decir alrededor de 89 millones de pesos, cantidad que tenía el día de su arresto. Este decomiso pasó a la historia como uno de los más grandes realizados en Alemania y se convirtió en estandarte de las investigaciones de las autoridades de dicho país en cuanto a seguridad en el Internet.
Foto: Netflix.
El arresto de Maximilian —quien fue juzgado como un menor— ocurrió principalmente por dos errores, a pesar de que encubrió sus grandes ganancias a través de un falso negocio de desarrollo de páginas web.
La primera pista
Lo que llevó a que la policía tuviera una pista inicial sobre lo que ocurría fueron una serie de paquetes sin entregar en el almacén de DHL en Radeberg y Leipzig que suponían haber retornado a un remitente que no existía, pero que no tenían los sellos postales necesarios, sin embargo, tales paquetes ya habían sido abiertos durante su viaje.
Foto: Netflix.
La labor de investigación
Maximilian comenzó a utilizar la misma estación, cercana a su hogar, para realizar todos los envíos de la droga. Su pereza ayudó a que la policía pudiera realizar una labor investigativa a la vieja usanza, vigilando los puestos de envío y por lo tanto vigilándolo a él.
«Él sabía que la policía no era capaz de leer sus emails que estaban encriptados o seguir el flujo de dinero de sus Bitcoins. Él era suficientemente inteligente para saber como crear su propio negocio en línea con la ayuda de Tor sin ser descubierto. Las direcciones de su sitio estaban registradas en Tonga y la Isla de Cocos; los servidores estaban en los Países Bajos. Él operaba en la darknet y clearnet, anunciaba públicamente que estaba vendiendo y se sentía seguro —tan seguro como puedes sentirte cuando estás vendiendo de forma global una gran variedad de sustancias ilegales. La policía no tenía nada sobre él en línea. No tenían nada sobre él hasta que estuvieron en su cuarto, que era su almacén y su oficina central». Vice
Foto: Netflix.Maximilian recibió una condena de siete años en prisión, no obstante, su condena tan sólo implica que forzosamente debe pasar las noches en la cárcel, por lo que es capaz de salir durante el día. Él, que ahora es mayor de edad, aprovechó estas facilidades para conocer a los creadores del show de Netflix que se inspiró en su caso e incluso enseñarles cómo empaquetaba las cajas de MDMA, además de brindar su testimonio sobre su caso.
Ve el trailer de la serie de Netflix aquí: