María Teresa Landa es recordada como la primera mexicana en portar el título de Miss México, aunque también se suele recordar sobre su turbia vida que fue consecuencia del machismo de la época en la que vivió.
El primer concurso de Miss México
Este certamen nació como una copia de los que existían en el país fronterizo: Estados Unidos. En 1928 la convocatoria para participar en el, se publicó en una revista, entre los requisitos se les pedía a las participantes tener entre 18 y 25 años, ser soltera y no ser artista.
Así fue como María Teresa Landa, de 18 años, se enteró del concurso e inmediatamente quiso participar. Las primeras eliminatorias se dieron con ayuda de los lectores de la revista, quienes mandaban cartas señalando a sus favoritas, así llegó María Teresa a la final con otras 4 compañeras, pero fue ella la elegida por el jurado para representar la belleza femenina de México en el Concurso de Pulcritud y Belleza Internacional, el antecedente directo del concurso Miss Universo.
Foto: INAH
Miss México 1928
Gracias a esto Maria Teresa adquirió popularidad inmediata: su rostro y nombre ocuparon los titulares de los periódicos y medios de comunicación, esto no se limitó a la prensa nacional, la fama de María llegó hasta Estados Unidos, incluso se dice que la buscaron de Hollywood para que participara en algunas producciones.
¿Quién era el esposo de María Teresa Landa?
María, pensando en su futuro alineado con las buenas costumbres de la época, rechazó toda oferta para casarse con Moisés Vidal Corro, un general de la revolución quien en ese entonces tenía 34 años de edad.
El general Vidal era originario del puerto de Veracruz, por lo que viajaba mucho hacía allá, mientras María se quedaba en su casa ubicada en la calle de Correo Mayor, al centro de la Ciudad de México. La mujer tenía prohibido salir o leer el periódico, su esposo era muy estricto y tenía ideas muy duras y arcaicas (incluso para la época) sobre el “buen comportamiento” de una mujer. Él consideraba que una mujer no debía leer sobre crímenes para mantener su mente sin intrigas, o por lo menos eso le decía a su esposa.
La desafortunada mañana del 29 de agosto María Teresa despertó y vio el periódico sobre una mesa en su casa. Decidió no desaprovechar la oportunidad para leer algunas noticias mientras su esposo dormía, sin embargo para su sorpresa encontró una nota en la que se señalaba a su esposo como un bígamo (que tenía dos matrimonios) y que incluso había sido demandado por una mujer veracruzana de nombre María Teresa Herrejón López. Esta era la verdadera razón por la cual el general Vidal no quería que María Teresa leyera el periódico, para que no se enterara de sus escándalos y reputación.
María encontró el arma de su esposo con facilidad e inmediatamente pensó en suicidarse, no sin antes cobrar venganza con Vidal por su traición y malos tratos, así que después de recibir algunas burlas por parte de su esposo, la mujer descargó el cartucho sobre él. Cuando intentó quitarse la vida ya no quedaban más balas, en ese momento le llegó un ímpetu de arrepentimiento y le pidió perdón al cuerpo difunto de su marido.
Foto: Infobae
El juicio
Este se dio en el mes de noviembre del mismo año y fue de carácter público. María recibió el apoyo de la gente que simpatizo con su arranque de furia y entendió que ella solo fue víctima de las circunstancias, por lo tanto Miss México fue exonerada. Por cierto, este juicio marcó precedente para que no hubiera más resoluciones de este tipo, ya que no garantizaban la imparcialidad.
¿Qué fue de María Teresa Landa?
Decidió dar un giro y dedicar su vida a la escuela, especializándose en el estudio de la Filosofía, Ética e Historia con un grado doctoral. Dio clases en preparatorias de la Universidad Nacional Autónoma de México hasta su retiro en 1986. Finalmente murió en 1992. Todo esto se sabe gracias a la investigación de la doctora Rebeca Monroy Nasr, que publicó en su libro María Teresa de Landa, una miss que no vio el universo, editado por el Instituto de Antropología e Historia (INAH)