«¿Tu madre estará viva? ¿Tendrás hermanas, sobrinas, nietas? ¿Qué sentirías si a ellas les hicieran lo mismo? O es que ¿acaso ellas siguen en tu lista de crímenes por cometer?» Dolorosas, corrosivas. Así son las preguntas que hace la familia de Ofelia Salazar al hombre que le quitó la vida en el Estado de México.
En una entidad en donde el gobierno encabezado por Eruviel Ávila prefiere guardar silencio ante los feminicidios que cada vez se hacen más frecuentes, los familiares de esta mujer escribieron una carta al asesino de Ofelia. Quieren que sus preguntas sean contestadas algún día.
«¿Qué te dio valor? ¿Qué te hizo ella para que le hicieras tanto daño? ¿Qué sentías cuando ella te suplicaba por su vida, cuando te miraba a los ojos mientras la apuñalabas, mientras la golpeabas?». El mismo silencio que persigue a los familiares de las víctimas que esperan que sus casos sean resueltos, es el mismo que perciben los familiares de esta joven de 31 años.
*Foto: Komanilel.
La muerte de Ofelia, como tantas más en el Estado de México, sigue sin esclarecerse. Ella trabajaba como empleada doméstica en un domicilio de San Pedro, Chiconcuac. Ricardo Chávez, su esposo, no supo nada de ella desde las 13:00 hrs del sábado 5 de agosto.
Preocupado, fue a buscarla a la casa en donde trabajaba y ahí la encontró muerta, con huellas de tortura y una cortada profunda a la altura de la espalda alta. Además, el cuerpo de Ofelia tenía marcas de ataques de perros, que según la prensa local, pudieron atacar a la mujer después de haber sido violada.
«¿Recuerdas sus gritos, su sufrimiento? ¿Cómo puedes conciliar el sueño? ¿Qué pensará de ti tu madre?», continúan preguntando en la carta dirigida al asesino. «Sé que piensas que cometiste el crimen perfecto, sé que te crees muy inteligente, también sé que cada que cierras los ojos ves su rostro que nunca te dejará en paz».
*Foto: Pulso.
Ante la nula respuesta de las autoridades al caso de Ofelia, sus familiares responsabilizan a la familia del delincuente por su conducta criminal. “Quiero que sepas que te responsabilizo a ti y a tu familia, que sabiendo lo peligroso que eras, te dejó interactuar en la sociedad como un ciudadano común».
Y es que, cuando la culpa recae directamente en las autoridades por la falta de resultados, los Salazar aseguran que la responsabilidad también es de las familias de los criminales. «He leído que las muchas familias de las mujeres muertas en el país responsabilizan a las autoridades, desafortunadamente las autoridades no educan, no enseñan valores a los ciudadanos, a los niños, no reprenden, dan ejemplo o amor, quien hace eso es la familia, los padres».
Finalizan la carta con la esperanza de que el criminal reciba el mensaje con la intención de entregarse a las autoridades. Le aseguran al asesino de Ofelia que si las autoridades no hacen justicia, otros lo harán.
«Si desafortunadamente tu actuar superara la inteligencia e integridad de las autoridades y las personas a nuestro alrededor, te tengo una noticia: la justicia divina llegará para ti, ni intentes esconderte o escapar porque tú mismo te has condenado a ti y a las personas que te apoyen».
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