El asesinato del archiduque Francisco Fernando de Austria, heredero al trono del Imperio austro-húngaro, el 28 de junio de 1914 en Sarajevo, fue el detonante inmediato de la I Guerra Mundial, La Gran Guerra que involucró a las potencias del mundo y a más de 70 millones de militares; pero las causas subyacentes jugaron un papel decisivo, esencialmente el imperialismo de las políticas exteriores de grandes potencias europeas como el Imperio alemán, el Imperio austro-húngaro, el Imperio otomano, el Imperio ruso, el Imperio británico, Francia e Italia.
El asesinato de Francisco Fernando por el nacionalista serbobosnio Gavrilo Princip dio como resultado un ultimátum de los Habsburgo al reino de Serbia. Las potencias europeas invocaron diversas alianzas formadas años y décadas atrás, por lo que sólo unas semanas después del magnicidio las grandes potencias estaban en guerra. A través de sus colonias, el conflicto pronto se extendió por el mundo.
Fotografías, cartas, videos e innumerables documentos públicos y privados sobre la I Guerra Mundial procedentes de 23 países europeos conforman los fondos reunidos por el proyecto Europeana, que se ha propuesto digitalizar los recuerdos para no olvidar la tragedia al cumplirse su centenario.
La iniciativa, que fue presentada hoy en la Biblioteca de Berlín, ha conseguido compilar más de 400 mil documentos de bibliotecas, 90 mil documentos y objetos personales y 660 horas de material de video de los años de la contienda.
Fotografiados y digitalizados, pueden ser consultados en el portal web “Europeana 1914-1948”.
Este proyecto tiene como objetivo “documentar el patrimonio común europeo a través de las distintas perspectivas y experiencias que cada país tuvo de la tragedia”, explicó Jill Cousins, directora de la Fundación Europeana, en la presentación hoy en Berlín.
Para elaborar este fondo, un total de diez bibliotecas nacionales, además de otras instituciones, entre las que se encuentra la Filmoteca Española, han realizado una labor de recopilación de sus archivos durante tres años.
La muestra de los documentos y objetos de los fondos alemanes puede verse desde hoy en Berlín, y el objetivo es llevar a cabo exhibiciones similares en Bélgica, Francia, Reino Unido y Serbia a lo largo de este año, coincidiendo con el primer centenario del inicio de la contienda.
“Con esta exposición el Gobierno Federal pretende mostrar, en particular a los jóvenes de Europa, que los derechos, valores y política común actuales son la respuesta al terror y la división del siglo XX”.
El principal objetivo de este “memorial de la tragedia” es que la colección siga aumentando. Todos aquellos que quieran aportar documentos u objetos podrán hacerlo digitalizados a través del portal de Europeana, aunque los berlineses tienen ocasión de ir mañana y pasado en persona a la biblioteca de la capital para participar con sus testimonios en el proyecto.
Muchos de los documentos son de copyright abierto para que puedan ser utilizados y difundidos libremente, como aseguraron los organizadores de esta iniciativa financiada con fondos europeos.