El pasado 30 de diciembre, el bailarín mexicano Isaac Hernández fue nombrado Primer Bailarín del Het Nationale Ballet (Ballet Nacional de Holanda), el máximo nivel al que puede aspirar un intérprete en la danza.
Al término de su presentación como príncipe Florimund en la producción de La Bella Durmiente fue ascendido por Ted Brandsen, director de la compañía, de Primer Solista a Primer Bailarín, convirtiéndose así en el primer y único mexicano, a su edad, en tener esta posición en una compañía de prestigio.
Isaac fue considerado una promesa del ballet desde temprana edad. Su figura, fuerte y masculina, la potencia de sus saltos y la gracia en las posiciones de sus brazos lo convierten en el perfecto caballero. Su entrenamiento comenzó en Guadalajara hasta 2003, cuando recibió una beca por parte de la prestigiosa escuela The Rock School for Dance Education, en Filadelfia. Su camino por el mundo del ballet de Estados Unidos no pasó desapercibido y al ganar el Grand Prix de NY, fue invitado a formar parte de la compañía pre-profesional ABT Studio Company, ahora ABT II, del American Ballet Theater.
El trabajo de Isaac Hernández se volvió familiar no sólo en México, sino internacionalmente cuando se le otorgaron becas para formar parte de los mejores corps de ballet. Ejecutó en el San Francisco Ballet en la que fue nombrado Primer Bailarín a los 18 años. Después de cuatro años en esa compañía, decidió reinventarse nuevamente y eso lo llevó a las filas del Het Nationale Ballet, en Holanda, en la que obtuvo el título de Primer Bailarín.