El agresivo discurso del presidente Donald Trump ayer por la noche en Phoenix, Arizona, desató controversia por todo lo que queda por discutir, no sólo al respecto del TLCAN y los ataques a la prensa, sino por la construcción del polémico muro fronterizo con México. Para Trump, soltarle la correa a los perros que apoyan su provocadora política migratoria es un paso más para cumplir su promesa de campaña.
*Foto: democracy now
El republicano aseguró que el polémico exsheriff del condado de Maricopa County, Joe Arpaio, señalado como un racista por la comunidad estadounidense «va a estar bien», esto en referencia a la consideración reciente de ofrecerle el perdón a la prisión que mereció por “desacato a la justicia” al no cesar su hostigamiento racista y xenófobo contra los inmigrantes.
«Voy a hacer una predicción, creo que él va a estar bien, ¿de acuerdo?», expresó Trump en el estado natal del racista exsheriff.
¿Por qué lo consideran un racista abierto?
Arpaio es conocido como el policía “más duro del Oeste” y es considerado un héroe para la clase conservadora y antiinmigrante de Arizona, donde dirigió la policía local de 1993 a 2016.
El hombre de 86 años está a la espera de su sentencia tras ser declarado culpable a fines de julio por “desacato a la justicia” dictaminado por la jueza federal del estado de Arizona, quien determinó que desobedeció intencionalmente las órdenes de dejar de hostigar racialmente a todos los conductores hispanos que pasaban por su jurisdicción.
*Foto: Balloon Juice
A pesar de la decisión final de los tribunales, Arpaio seguía persiguiendo implacablemente a todos los documentados e indocumentados latinos, muchas víctimas de Arpaio eran arrestados y detenidos simplemente por su aspecto hispano.
«¿Por qué quieren meter a la cárcel a un sheriff que cumplía con su deber? Él ha hecho mucho por la lucha contra la inmigración ilegal, es un patriota estadounidense», se preguntó el Presidente.
El cazador de inmigrantes
Arpaio estableció una dura política contra la inmigración que para muchos analistas fue “despiadada” y atentaba contra los derechos humanos de los migrantes. Estableció una prisión duramente criticada, ‘La ciudad de las Carpas’ donde los reos (en su totalidad hispanos migrantes) tenían que soportar las extremas temperaturas del desierto de Arizona al aire libre, además de obligarlos a vestir ropa interior de color rosa para humillarlos.
*Foto: High Contry News.
Pero sus permanentes operativos contra los indocumentados le dieron la fama a nivel internacional como un símbolo de la lucha contra la inmigración, pero también como un ícono del racismo fascista.
«Sería un pecado mortal contra la Justicia dejarlo libre», dijo el congresista local Rubén Gallego . Por su parte, Carlos García, el líder de la organización Puente Arizona, que protege los derechos de los migrantes y que condena las declaraciones de ayer del Presidente, dijo que indultar a Arpaio sería «apoyar oficialmente el racismo y la supremacía blanca».
Asimismo, la Unión Estadounidense por las Libertades Civiles respondió ante las declaraciones de Trump: «No, señor presidente. Arpaio no estaba ‘simplemente haciendo su trabajo’, estaba violando la constitución y los derechos humanos de los latinos con sus medidas racistas e hispanofóbicas».