Isaac y Angélica se reunían cada jueves en casa de ella. Escuchaban música y fumaban marihuana, la cual conseguían a través de uno de los amigos que ambos tenían en común. Limpiaban la hierba y la colocaban en una pipa. A uno le ganaba la risa, al otro le daba por analizar todo lo que encontraba a su paso.
El consumo aumentó hasta dos o tres veces por semana. Conocían sobre los beneficios de la planta y en sus charlas alguna vez tocaron el tema sobre las consecuencias que tiene fumarla o del uso que se le da para el tratamiento de algunas enfermedades como el Parkinson.
Lo que Isaac y Angélica desconocían, era que al consumirla se convirtieron en parte del porcentaje de gente que corre el riesgo de morir de hipertensión y que, cada año, la cifra aumenta mientras la sigan utilizando.
*Foto: Telegrafi.
Según una investigación publicada por el European Journal Preventive Cardiology, el consumo de marihuana se asoció con un triple riesgo de muerte por hipertensión. Los científicos aseguran que hay poca investigación sobre el impacto del uso de marihuana en la mortalidad cardiovascular y cerebrovascular.
«El apoyo para un uso liberal de la marihuana se debe parcialmente a las afirmaciones de que es benéfica y sin daños potenciales a la salud», declaró Bárbara Yankey, subdirectora del estudio que fue realizado en la escuela de salud pública de la Universidad Estatal de Georgia, en Estados Unidos. «La marihuana estimula el sistema nervioso simpático, lo cual conduce a incrementos en el ritmo cardíaco, la presión sanguínea y la demanda de oxígeno».
*Foto: Growlandia.
Fueron 1,200 personas las que se sometieron a este estudio retrospectivo. Todas ellas tenían más de 20 años de edad y, entre 2005 y 2006, se les preguntó si alguna vez habían utilizado marihuana. Esta información se fusionó con los datos de mortalidad de 2011 del Centro de Estados Unidos para las Estadísticas de Salud. Estos resultados se ajustaron en términos de variables de confusión como fumar tabaco.
La duración promedio del uso entre los consumidores de marihuana fue de 11.5 años. Cada uno de ellos tuvo un riesgo de muerte 3.42 veces más alto por hipertensión, que aquellos que no la consumieron. Además, el riesgo aumentó 1.04 veces por cada año de consumo extra.
«A pesar de la noción extendida de que la cannabis es benigna, esta investigación se suma a trabajos previos que sugieren otra cosa», concluyó Ian Hamilton, profesor de salud mental en la Universidad de Nueva York.
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