Cerca de 50 personas han fallecido en los últimos días en Estados Unidos por el impacto de la gélida tormenta Elliot, que ha dejado intensas nevadas y fuertes vientos en gran parte del país, provocando las fiestas decembrinas más frías de las ultimas décadas. La zona más devastada es el noroeste del estado de Nueva York, donde las autoridades elevaron este lunes a 27 el número de muertos por el temporal.
Los cuerpos fueron hallados en casas, vehículos y en la calle. La ciudad de Búfalo, en Nueva York, fronteriza con Canadá y acostumbrada al frío, ha quedado totalmente colapsada por la nieve y su aeropuerto permanece cerrado. La gobernadora neoyorquina, Kathy Hochul, dijo que ha sido la “tormenta más devastadora” que se recuerda en la zona y ha pedido a los ciudadanos que eviten conducir por carretera. En Ohio, cuatro personas murieron y varias resultaron heridas en un aparatoso accidente en una autopista en el que estuvieron involucrados unos 50 vehículos.
Las frías temperaturas continuarán
El alcance de la tormenta ha sido casi sin precedentes, extendiéndose desde los Grandes Lagos, cerca de Canadá, hasta el río Grande (río Bravo) a lo largo de la frontera con México. Más de 200 millones de estadounidenses, alrededor del 60 % de la población, se ha enfrentado a algún tipo de aviso o advertencia relacionado con el clima invernal y las temperaturas cayeron drásticamente por debajo de lo normal desde el este de las Montañas Rocosas hasta los Apalaches.
La ciudad de Nueva York vivió el día de Navidad una temperatura mínima de 10,5 °C bajo cero, algo no visto desde 1872. Washington, la capital estadounidense, estuvo a 10 °C bajo cero, la Navidad más fría desde 1983, y los termómetros en Tampa, en Florida, bajaron de los cero grados, algo que no ocurría desde 1966.
Ref. EFE
Fotos: EFE