Los discursos políticos que nos han invadido por todos los medios posibles se aseguran de no decir nada. No sólo evitan los temas que ignoran, sino también los que les causan “ruido”. Aquellos que les pueden generar preguntas incómodas o que los obligan a tomar una postura. ¿Cuál es el que más evitan? Libertad.
Cada representante de los partidos que están en disputa, se encarga de encabezar spots, entrevistas y debates con los mismos argumentos desgastados que escuchamos sexenio tras sexenio: “este es el nuestro momento”, “ahora sí vamos a cambiar”, “somos nuevos y renovados”, “nosotros no robamos”, “no toleraremos la corrupción”, “trabajamos por ti”. En fin, como diríamos coloquialmente: “es la misma gata pero revolcada”. Este hecho orilla a que un porcentaje importante de mexicanos siga considerando su voto como indeciso o en el peor de los casos, inútil.
Faltan seis meses para las elecciones 2018 y dentro de la esfera de temas a tratar, existen tres casos que predominan en la agenda política: legalización de la marihuana, matrimonio igualitario y los problemas de migración. Situaciones preocupantes para todos los ciudadanos, sobre todo, para los jóvenes. Los políticos tradicionales los abordan con el mismo ritmo (como si de una letanía se tratara) y una estructura que se ha utilizado desde sus inicios para generar simpatizantes. Por otro lado, los candidatos independientes están escuchando a los jóvenes para enfrentar lo que los partidos políticos nunca se han atrevido.
¿Esta diferencia será determinante para votar por lo mismo de siempre o por un candidato independiente?
_
Legalización de la marihuana
La libertad es un derecho humano básico al que tenemos gozo por el simple hecho de haber nacido en un país donde así lo respalda la ley, ¿pero dónde están esas leyes?
En 2015, la Suprema Corte de Justicia de la nación aprobó el consumo de marihuana, pero sólo para cuatro personas que interpusieron un amparo cuya finalidad era uso recreativo. Hecho que atribuyó más fuerza cuando el tema se ponía sobre la mesa.
“En México, 1.2 por ciento de la población de entre 12 y 65 años consume esta droga, según datos de 2011”
El hecho de no permitirlo, ¿es realmente preocupación por los consumidores o por defender un mercado ilegal que los enriquece?
_
Matrimonio igualitario
Hace apenas unos años no podíamos ni imaginar a una persona aceptando con plenitud sus preferencias sexuales y los pocos que se atrevían a hacerlo eran fuertemente castigados por la sociedad. Hoy es adoptado con mayor familiaridad y menos prejuicios.
La excepciones son claras e inevitables, lo alarmante es que ciertos políticos también se respaldan en argumentos contradictorios para dar por hecho que está mal. Situación que se refleja en las cifras del país, pues sólo nueve entidades de la República han logrado promover, mediante la ley el respeto, tolerancia e igualdad independientemente de tus gustos.
Familia son quienes te aman y a quien tú amas. La libertad debe reflejarse hasta en el momento donde decides con quién la vida, TU VIDA.
_
Migración
¿Por qué en Los Ángeles, California hay más mexicanos que en Monterrey? Porque millones de personas de nuestro país ven imposible un futuro en su propia tierra, así que irse al extranjero para sobrevivir no se convierte en una opción, sino en la única posibilidad de lograrlo.
De los aproximadamente 12,000,000 mexicanos que viven fuera de México, el 97.33% radica en Estados Unidos de América”
Comprender la libertad desde sus diferentes facetas es la base de una sociedad democrática y abierta. México ha dado señales de querer caminar hacia delante y no retroceder como algunos políticos se han encargado de hacerlo. Cada quien elige lo que cree mejor sin violar los derechos de otros, asumiendo las consecuencias y decidiendo por sí mismos de manera independiente.
Dejar que las ideas conservadoras de siempre –que al final sigue siendo una fusión de Izquierda y Derecha–se interpongan un sexenio más, es como seguir aceptando la corrupción, pobreza y desigualdad que claramente está siendo ignorada. Entonces, ¿en dónde queda nuestra libertad?