El cine es una de las disciplinas más impresionantes dentro del mundo artístico; en este ámbito se mezclan, incluso, muchas de las formas de expresión que utilizamos para transmitir mensajes o emociones.
Quienes logran dominar todos estos elementos nos regalan películas sublimes que quedan para siempre marcadas en la historia de la cinematografía, porque existen miles de películas, pero buenos cineastas, sólo han sido algunos.
Tal es el caso de Federico Fellini, uno de los mejores directores en la historia del cine italiano. Su legado es imprescindible y un día como hoy, 20 de enero, pero de 1920 llegó al mundo para regalarnos obras inigualables.
Para entender la importancia de la obra de Fellini, tenemos que entender el contexto en el que vivió. El director y guionista nació en una familia de clase media y de acuerdo a lo declarado por él mismo en algunas entrevistas, a la edad de ocho años escapó de su casa para unirse a un circo.
Ya en su formación profesional, el joven artista descubrió su talento como dibujante mientras iba a la escuela. A su vez, sentía gran admiración por el creador del personaje de cómic ‘Little Nemo’, Winsor McCay. Este talento le consiguió empleo como caricaturista en el Cine Fulgor.
En dicho trabajo era el encargado de dibujar los retratos de los actores para anunciar los filmes. Ya para 1938, empezó a publicar, en una revista de Florencia llamada ‘420’, algunas viñetas.
Muchas veces afirmó que sentía un gran gusto, en su infancia, por Chaplin y algunas tiras cómicas de Estados Unidos. También trabajó como periodista y guionista de historietas. Su incursión en el cine inició como escritor de secuencias para actores reconocidos de los años 40.
Luego de esto, Federico Fellini conoció la radio, misma etapa fue una las más felices en su vida. Aquí inició formalmente su trabajo como guionista de programas. Fue también en esta época en donde conoció a Giulietta Masina, actriz con la que tiempo después se casó y trabajó a lo largo de su carrera.
A finales de la década de los 40, el cineasta ya conocía bien la industria del cine, pues había colaborado en los guiones de algunas películas e, incluso, había dirigido una cinta junto a Alberto Lattuada. Por lo que, en 1951, lanza su primer filme con él como directo único, ‘Lo Sceinco Bianco’ (El Jeque Blanco).
Sus increíbles producciones lo posicionaron como el cineasta más importante de la posguerra en Italia. Su obra fue tan importante que hasta un término fue in ventado en su honor, lo ‘fellinesco’. Esto para denotar esos personajes o ambientes extraños y, en un punto, surrealistas que Fedrico Fellini mostraba en sus películas.
Misma influencia en la sociedad actual, se ve marcada en el término ‘paparazzi’, pues en uno de sus filmes más importantes ‘La Dolce Vita’, el protagonista se llamaba Paparazzo.
Al principio, las tramas que presentaba eran, en gran parte, influidas por el neorrealismo de la época, lo que le valió el reconocimiento y sentó las bases de su carrea. Después llegó la fama; en este punto era sumamente taquillero y esto le hizo ganar algunos premios como el Oscar. Y al último, perdió el interés del público y se distanció de la crítica.
Así pues, un 31 de octubre de 1993 murió a la edad de 73 años en Roma, Italia. Los medios reportaron y la mentaron su pérdida, pues este director le mostró al mundo, un cine excepcional que demostraba fielmente a la Italia moderna.
Aquí te dejamos algunas de sus películas más importantes, incluso, consideradas por los expertos como las cintas mejor hechas de la historia del cine. Estos filmes le dieron algunos premios importantes además del reconocimiento mundial.
Películas importantes en las carrera de Federico Fellini
La strada (1954)
8½ (1963)
Amarcord (1973)
Los inútiles (1953)
La dolce vita (1960)