“Justo cuando sus piernas se enredaban con una ansiedad casi dolorosa y al respirar se tragaban el aliento del otro; justo cuando en el propio pecho retumbaba el corazón del amante y los vientres eran húmedas ventosas (…)”. Así, como menciona Rosa Montero, dos cuerpos que se atraen, se unen a una danza de vaivenes. Así como dos cuerpos no puede mantenerse alejados porque experimentan una incertidumbre que fractura. Así como dos cuerpos que sólo pueden sentir calor juntos porque separados el frío se apodera de sus pieles. Así como dos cuerpos que se necesitan como la sed necesita la humedad del agua. Así, hoy te confieso que estoy loca por ti, que no puedo dejar de pensar en tus labios delicados y tus besos violentos, que no puedo dejar de pensar en tus brazos colocándolos alrededor de mi cintura, que no puedo dejar de soñar que me tomas de todas las formas, que me suspiras, que me inhalas.
El amor es una mezcla de pasión y dolor, y lo mejor que se puede hacer es compartir. El amor es una delicia a tu lado porque es correspondido, altera todo nuestro cuerpo y sentimientos… Todo lo que siento por ti es grande, es magia, es un terremoto en mi interior.
1. Besas de la mejor manera, puedes llegar al fondo de mi alma con sólo cerrar mis ojos y sentirte. Llenas de magia mi estómago.
2. Dejé atrás mil motivos para llorar, a veces lloro pero de alegría o emoción; sí, tienes ese don de sorprenderme, eres electricidad en mi cerebro.
3. Sólo es necesario estar a tu lado unos minutos para estallar en risa, me haces tan feliz que alteras mucho mis sentidos y mi humor es único desde que estás.
4. Eres tan oscuro y aun así iluminas mi cabeza, pues opacas a todos los que están a tu alrededor. Y siempre me pregunto, ¿cómo es posible que llenes de color mis pensamientos?
5. Eres el mejor motivo para dormir y despertar, amo verte en tu lado de la cama y mirar tus ojos cerrados, pues sé que lo primero que harás será abrazarme y provocas un cosquilleo en todos mis huesos.
6. Cada que compartimos momentos, no hay principio ni final, no podría dejar de sentirte, alteras todo mi sistema nervioso. No puedo pensar, me bloqueas.
7. Cuando tengo que despedirme duele; duele tanto no verte algunas horas o días, me pongo de mal humor, pero lo único que me ayuda es la alegría de saber que siempre estarás para mí, y mi corazón vuelve a palpitar como caballo desbocado.
Todo mi cuerpo responde a ti, sólo no te vayas nunca, no me dejes, sigámonos amando como hasta ahora; es tan rico y delicioso.
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El amor nos vuelve locos, irracionales, impulsivos, ansiosos… pero felices, aunque es probable que alguna vez hayas experimentado un tipo de amor irresponsable, así que si quieres leer más, hazlo aquí.
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Las fotografías que acompañan al texto pertenecen a Laurken Kendall.