Hasta cierto punto, stalkear a las personas se ha convertido en una práctica común para saber un poco más de las mismas; los lugares en los que se desenvuelven, amigos que las rodean, gustos, intereses y hasta su rutina diaria. Y es que cuando terminas con alguien eso es lo primero que haces, revisar todas sus redes de inicio a fin con la esperanza de encontrar algo que, al final, termina destruyéndote mucho más de los que crees.
Hoy en día es imposible no estar cerca de Internet o de las redes sociales, por ello, te cuesta tanto trabajo no entrar de vez en vez –o continuamente– a los perfiles de tu ex. Quieres saber qué hace, si sale con alguien, si publica algo para ti o simplemente para volver a ver sus fotos y, por un momento, regresar al pasado como si el tiempo no hubiese pasado en ustedes. Sí, quizá pueda parecerte una práctica sumamente normal e inofensiva, pero lo que no sabes es que stalkear a tu ex puede traerte consciencias graves al grado de poner en riesgo tu salud mental y a tu corazón.
1. No lo estás superando
Cuando te metes a ver todas sus redes sociales haces más complicado tu proceso para dejarlo atrás. Se hace más difícil que te recuperes de la ruptura, sin tomar en cuenta que mereces seguir adelante. Si entras a espiar todas sus cuentas, solamente provocas que lo superes más lento de lo que quisieras.
2. Puede llevarte a los extremos
Si espías las redes de tu ex 24/7 puede llevarte a que también lo espíes en la vida real. La mayoría de las personas creen que stalkear no le hace daño a nadie, sin embargo, estudios han confirmado que algunos comportamientos que realizas en la tecnología, podrías llevarlos al mundo de la realidad. Debes tener mucho cuidado, este hábito puede dañarte severamente, incluso provocarte ansiedad y depresión y, por ende, no darte la oportunidad de que conozcas nuevas personas y, a su vez, llenarte de angustia.
3. Falsas esperanzas
Cuando le dedicas mucho tiempo al stalkeo de tu ex, es probable que inventes en tu mente que sigues a su lado. Te acercas a él y te haces creer que la relación continua y que ustedes pueden volver a estar juntos aunque en su relación haya estado llena de problemas. Vives en una ilusión que te lastima día a día.
4. No puedes ser feliz
No importa si sólo le dedicas 10 o 15 minutos a sus redes, son los mismos en que la tristeza te invade, así como la angustia y frustración. Tu ruptura está trayéndote mucho dolor, la misma que provoca que no disfrutes nada de lo que haces, ni siquiera de las personas que te rodean y los grandes momentos que tienes frente a ti. No los dejes ir, es hora de que mires hacia adelante.
Una ruptura amorosa es un duelo y, como tal, debes pasar por un proceso de dolor y aceptación para que el corazón partido que éste provocó lo dejes atrás y logres sanar las heridas de tu pérdida. Sí, es normal sentirte mal, que quieras saber qué es lo que hace esa persona y si ya te olvidó, pero esto también te lastima mucho y entras a un autosabotaje que impedirá que salgas bien de esto. Es hora de que le des la vuelta a la página y veas por ti y, sobre todo, que comprendas que aférrate a lo que ya fue puede dañarte mucho más de lo que crees.
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