¿Has considerado que el éxito es lo único o lo más importante que se necesita para ser feliz? ¿Has logrado todos y cada uno de tus propósitos en medida que los proyectas, pero aparentemente esto no te permite sentir satisfecho y feliz en tanto lo consigue? A veces la felicidad no es realmente como la pensamos. Aunque pareciera fácil, este sentimiento es un término abstracto y complejo que para muchas personas parece difícil de distinguir y conseguir.
Aristóteles señala la felicidad como la perfecta satisfacción del hombre, a través de la plenitud que alcanza gracias al desarrollo de su ser verdadero y la conformidad no sólo de sí mismo, sino con todo lo que le rodea. Se debe distinguir a la felicidad del placer, pues éste último es un sentimiento efímero, debido a que representa la satisfacción de forma momentánea. En este sentido, la felicidad hace referencia a una etapa de la vida de manera general y no define sólo a un momento.
Las personas narcisistas, maquiavélicas y con cierta psicopatía suelen distinguirse por su peculiaridad para lograr el éxito en todo lo que se proponen, pero no con ello se garantizan a sí mismos la felicidad. Para este tipo de personalidades la satisfacción no siempre les será posible, pues el deseo por obtener cada vez más de lo que quieren o ya han conseguido les impide sentirse satisfechos. Por el contrario, seguirán en las búsqueda para lograr cada vez más.
Personalidad oscura es como se le denomina al conjunto de estos tres factores: narcisismo, maquiavelismo y psicopatía. Las personas se caracterizan por demostrar cierto grado de egoísmo, insensibilidad y malevolencia, principalmente en las relaciones interpersonales. La tríada se asocia a la poca amabilidad y al menor grado de responsabilidad que una persona tiene, pues buscan conseguir sus propósitos sin importar el bienestar de los demás o los métodos que sean necesarios, pues sus deseos deben ser logrados a toda costa. La individualidad también figura como un aspecto importante porque al sentirse autosuficientes no aprenden a colaborar con otros, sino que recurren a técnicas como la manipulación para que los demás actúen a su voluntad y siempre en beneficio de sí mismos.
Por otra parte este tipo de personalidad suele ser más común en hombres que entre mujeres. Las relaciones interpersonales que establecen suelen ser superficiales porque no crean lazos ni vínculos, puesto que ven a los demás como seres débiles y vulnerables ante ellos. No mantienen relaciones de amistad a largo plazo, cuestión que desequilibra el bienestar para sí mismos. Es importante saber que los amigos se convierten en una parte fundamental para la felicidad, ya que la confidencia y la sensación de apoyo impulsa el bienestar de todo ser humano, a diferencia de la admiración, sensación que las personalidades oscuras buscan obtener. Sin embargo, aunque logren mantener contacto con algunos conocidos, no lo hacen como sinónimo de amistad, sino porque saben que en algún momento serán útiles para sus beneficios.
Se consideran más atractivas las personas que perfilan en la tríada oscura, aunque no suelen ser las personas más aptas para formar una relación a largo plazo, pues el desinterés que reflejan por los demás termina con las relaciones sentimentales que puedan llegar a construir. Además quienes se involucran con ellas suelen enfrentarse a situaciones de violencia física y principalmente psicológica. Es por eso que se les dificulta mantener una relación de forma estable y prolongada, además no esperan encontrar amor en las otras personas sino admiración, y no siempre consiguen desarrollar sentimientos por sus parejas, cayendo en el desinterés.
Además de no poder mantener relaciones duraderas tan fácilmente, al poco tiempo de formar alguna conexión sentimental buscan el encuentro sexual con sus parejas, pues se distinguen por denotar estrategias de vida rápida. La tendencia por el énfasis en el sexo figura como prioridad y dejan de lado la paternidad porque sólo buscan la reproducción como parte del ciclo en vida y no como un lazo sentimental.
Los planes de vida no son fáciles de conseguir y para quienes figuran en la tríada oscura se vuelve un reto mayor porque no son personas a las cuales los planes a futuro les funcionen, debido al poco compromiso que llegan a mantener, pues a medida que alcanzan sus fines dejan de lado cualquier tipo de relación o sueño que pudieran sostener con alguien más. Por ello no pueden sentirse plenos.
En la actualidad distintas redes sociales han servido como herramienta de impulso para la personalidad oscura. La actualización de estados permite a las personas compartir parte de su éxito y sentirse realizados a través de la interacción que los demás tienen sobre lo que publican, gracias al conteo de likes, visualizaciones, e incluso de veces que sus contenidos son comentados o compartidos. Estas plataformas sirven para la competencia social y para que algunas personas se sientan satisfechas mientras comparten sus logros con los demás, aunque no sea de la forma en la que lo aparentan.
Quizá el término “felicidad” se pueda emplear de manera distinta y se suela mezclar con situaciones efímeras que vivimos de manera regular, por ello se vuelve complejo y usualmente se confunda con el placer sin poder disfrutar de la verdadera sensación de felicidad.
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Puedes ser realmente feliz en pocos pasos y hacer de este sentimiento un hábito y no estado de ánimo
