Los medios de comunicación tienen una fuerte influencia en la gente: en sus posturas políticas, en su descontento ante la autoridad, etc. Lo saben en Corea del Norte, Cuba, Venezuela y lo sabemos en México. Si eres de España o de algún país en Latinoamérica y no conoces la particular situación en la que vive la sociedad mexicana, podrías pensar que es una comparación totalmente desproporcionada, pero no.
The Guardian o la BBC han estudiado a el trabajo de Chumel, incluso en Francia publicaron su historia y aunque comúnmente lo comparan con Jon Stewart, el mexicano representa algo más trascendental que un simple programa de sátira política en un canal de YouTube rentable; representa más que una simple celebridad o una inspiradora historia de éxito de un joven del norte de país. Chumel y los foros que llena representa la euforia que se vive al descubrir la libertad de expresión en México, el simple hecho de que no exista un ensayo detrás de esto también representa lo ajenos que somos ante este cambio cultural.
Durante sus entrevistas, Chumel remarca que él simplemente es un comediante, un tipo que hace su trabajo, pero también es el comienzo de una nueva era de la comunicación y de la información en México. Sé que es una celebridad y puede caer bien o mal; podemos pensar que es pretencioso o falso, pero no perdamos de vista lo que representa en este momento, porque si lo olvidamos, la sinergia de este cambio cultural morirá y volveremos a nuestros vicios de una sociedad perezosa. Chumel no es nadie sin un despertar colectivo, su trabajo trasciende el entretenimiento.
Jorge Zepeda Patterson, Ciro Gomez Leyva, Aristegui, todos los periodistas de México y Latinoamérica, por favor sigan trabajando, los necesitamos más que nunca, hagamos equipo, no permitamos que la competencia destruya el verdadero fin del periodismo y la información que es tener una sociedad inteligente, ambiciosa, justa, que no se queda callada; que exige, que crece, que no compromete su integridad, que denuncia la deshonestidad, que honra sus valores y es valiente. Una sociedad. Querido lector, no veas o escuches las noticias y te quedes callado porque te educaron con la idea de que es de mala educación hablar de política, al contrario, tenemos que hablar de política para educarnos.
Te compartimos la lista de Los países más peligrosos para ser periodista, pues sabemos que ser comunicador de la verdad no es cómodo para muchos gobiernos.