Al término de la Primera Guerra Mundial, Estados Unidos elaboró el Tratado Naval de Washington con el que limitaba el número de navíos que Japón podía poseer, para mantener el control de las aguas con flotas norteamericanas y británicas.
El Tratado y el posterior embargo petrolero que la nación nipona sufrió por parte de los Estados Unidos sirvieron de contexto para que en 1941 una flota japonesa lanzara un ataque aéreo sobre Pearl Harbor, con el que Japón y Estados Unidos entrarían en estado de guerra.
La respuesta de los norteamericanos fueron los bombardeos atómicos sobre Hiroshima y Nagasaki, ordenados por el entonces presidente de Estados Unidos, Harry Truman.
Aquel fatídico agosto de 1945 quedó en la historia como el momento en el que sucedieron los únicos ataques nucleares. Se cree que a finales de ese año las bombas habían matado a 140 mil personas en Hiroshima y 80 mil en Nagasaki, de esa cantidad se estima que la mitad había fallecido durante los días que duraron los bombardeos. Entre las víctimas, del 15 al 20 por ciento murieron por lesiones o enfermedades atribuidas al envenenamiento por radiación. Las consecuencias en la salud con enfermedades como la Leucemia o distintos tipos de cáncer continuaron por la permanente radiación que cobra vidas aun a la distancia de casi siete décadas.
Pero como en estos casos, el testimonio más desgarrador sólo puede ser contado por los sobrevivientes, quienes guardan en la memoria las imágenes de la pesadilla de olas de fuego y calor que demostró que la mayor amenaza para el hombre sigue siendo él mismo.
Children of the Atomic Bomb es un proyecto de la organización norteamericana UCLA involucrada en el estudio de los efectos del ataque nuclear durante las décadas posteriores al evento. El Dr. James N. Yamazaki, pediatra, en conjunto con la UCLA y el Centro de Estudios de Asia y de América desarrolló una investigación sobre los llamados “hijos de la bomba atómica”, los sobrevivientes al ataque nuclear, que comprende el seguimiento sobre el desarrollo físico y las consecuencias de la radiación en el cerebro de las personas quienes salvaron su vida frente a la tragedia.
El Dr. Yamazaki contaba con 33 años en 1949 cuando fue designado médico principal por parte de Estados Unidos para estudiar los efectos de la bomba en las generaciones posteriores al ataque nuclear. Las investigaciones pusieron de manifiesto la vulnerabilidad de los niños frente a este tipo de catástrofes, lo que derivó en el proyecto “los hijos de la bomba”, mismo que recoge las consecuencias físicas que este evento produjo: el aumento en las incidencias del cáncer y el nacimiento de individuos con malformaciones y retraso mental a causa del desarrollo de células cerebrales enfermas.
Parte de la investigación comprendió una serie de dibujos realizados por los sobrevivientes. El Dr. Yamazaki y su equipo pidió a estos, que entonces eran niños, dibujaran los episodios más significativos que recordaran de la tragedia. Los dibujos revelaron el grado de penetración que un evento de este tipo tiene en la memoria de los niños; como pediatra, Yamazaki está especialmente preocupado en las imágenes de terror que habitan de por vida la mente de los menores y afectan su estabilidad emocional a lo largo de su vida adulta.
NAKANO Kenichi
There was one man still alive in the streetcar, and he asked for water.
Year of Birth: 1898 Age at time of blast: 47 Age when image created: 76
Los dibujos elaborados por los ahora adultos son episodios gráficos del terror que vivieron durante la caída de la bomba que destruyó “el cuerpo humano, el cerebro y los genes durante generaciones”. Cada dibujo cuenta con una descripción de la imagen, la edad de la persona en el momento de la tragedia y la edad cuando realizó el dibujo. La serie integró una exposición para el Hiroshima Peace Memorial Museum en Japón.
KIYOYOSHI Gorō
One hour after the explosion: From a hill on the outskirts, we looked out over the city engulfed in flames.
Year of Birth: 1897 Age at time of blast: 48 Age when image created: 76
Con esta investigación se determinó que las armas nucleares constituyen el mayor peligro para la humanidad. La amenaza nuclear está presente de cara al siglo XXI con Estados Unidos y Rusia, dos de las naciones que poseen la mayor cantidad de armas de destrucción masiva en el mundo, pero sobre todo por la lucha entre los países por el control y la fabricación de armas nucleares, principalmente en Asia, donde aún los fantasmas de los ataques nucleares de 1945 persiguen a la población y su descendencia.
YAMASHITA Masao
Placing names on the injured before death at Honkawa Elementary School.
Year of Birth: 1909 Age at time of blast: 36 Age when image created: 66
KOBAYASHI Masao
They fled with their arms raised in front like a procession of ghosts.
Year of Birth: 1899 Age at time of blast: 45 Age when image created: 74
TAKAHARA Yoshio
My dead friends. They became bald. Their gums and fingertips bled, and they died.
Year of Birth: 1911 Age at time of blast: 34 Age when image created: 63
YOKOYAMA Yoshihisa
Night scene of cremating the dead at the riverbed.
Year of Birth: 1913 Age at time of blast: 32 Age when image created: 62
YAMASHITA Masato
August 31: My younger brother who died vomiting blood. His nose was bleeding, and his hair had fallen out. There were small red spots all over his body.
Year of Birth: 1924 Age at time of blast: 20 Age when image created: 50
TAKUMEI Kasumi
Dead body of a U.S. POW tied to a bridge rail.
Year of Birth: 1930 Age at time of blast: 15 Age when image created: 45
YAMADA Sumako
In a split second strange rings of lights spread over my head.
Year of Birth: 1924 Age at time of blast: 20 Age when image created: 49
ISHIKAWA Fumie
Dead pupils on the verandah of an elementary school. One dead boy was standing and leaning on an umbrella shelf.
Year of Birth: 1928 Age at time of blast: 16 Age when image created: 46
Mira otros dibujos en este link.