En un país que vive en guerra justificada por el “combate al narcotráfico” podría pensarse que el consumo de estupefacientes prohibidos debería de estar a la baja, pero la realidad de México es muy diferente.
Es cierto que la batalla que las Fuerzas Armadas Mexicanas libran a lo largo y ancho del país está enfocada en combatir a las personas que hacen una fortuna gracias al negocio ilícito de la venta de drogas; sin embargo, es innegable que ellos no existirían si no hubiera un mercado listo para abastecerse de esas sustancias y es ahí donde se nota -aún más- que la estrategia de sangre y balas es un error que ya costó más de 100 mil vidas.
Este lunes 26 de junio el comisionado nacional contra las adicciones, Manuel Mondragón y Kalb, reveló los resultados de la Encuesta Nacional de Drogas, Alcohol y Tabaco (ENCODAT) 2016, la cual arrojó el dato de que, de 2011 a 2016, el porcentaje de mujeres que consumió algún tipo de droga ilícita aumentó un 105 por ciento en ese lapso.
Mondragón aclaró que estas cifras no se trata de personas que sean adictas, pero es un dato preocupante porque el probar una droga puede ser el primer paso para convertirse en dependiente de esa sustancia.
Las adolescentes también registraron un incremento importante , ya que en el 2011 sólo 127 mil jóvenes aceptaron haber consumido algún tipo de sustancia psicotrópica prohibida, mientras que en la encuesta del 2016 ese número se incrementó a 412 mil.
“Las adicciones son un problema de salud pública que representa un reto para todas las instancias de salud y también para la procuración de justicia por su grave impacto social”, dijo en conferencia de prensa Manuel Mondragón y Kalb. “Se debe trabajar para la reducción de demanda y controlar la oferta”.
Según las palabras del comisionado nacional contra las adicciones, el incremento en el consumo de drogas de parte de los jóvenes está relacionado con “problemas de marginación, falta de oportunidades deportivas, culturales, falta de información y participación ciudadana”, por lo que invitó a todas las instancias de gobierno a trabajar para reforzar esos aspectos, aunque no dijo nada sobre por qué los números más elevados son referentes a mujeres.
Por su parte, el secretario de salud, José Narro, dijo que él y su equipo tienen que combatir este problema con acciones más efectivas, ya que no están alcanzando los objetivos deseados.
“Hemos visto datos preocupantes en materia de consumo, de tráfico, de ganancias, de blanqueo de diversificación del crimen organizado y de sus áreas de influencia”, explicó Narro. “No tiene una solución y desde la salud debemos seguir combatiendo en la prevención y en el tratamiento”.
En el informe que se desprende de la ENCODAT, también se dio a conocer que el consumo de marihuana aumentó 55 por ciento, mientras que el uso de la cocaína se mantuvo estable respecto a los datos del 2011. Otras drogas que registraron un incremento en el consumo dentro de la población juvenil de México son el crack, las metanfetaminas y alucinógenos.
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