La esquelética divina
Siempre andará entre parientes
Sólo La Bella Catrina
Nos hace pelar los dientes.
En una vieja casona de Saltillo, Coahuila, se ubica un recinto dedicado a la figura creada por artistas mexicanos como una metáfora de la alta clase social mexicana anterior a la Revolución: La catrina, esqueleto ataviado de elegantes y coloridas ropas.
Inaugurado el 2 de noviembre de 2009, el Museo Katrina (MUKAT) nació de la iniciativa de preservar la tradición del Día de Muertos, así como de plasmar su estética en papel maché. Erik Morales y Cinthya Fuentes fueron los encargados de dar vida a este museo, ambos artistas moldeadores de papel maché.
Se trata de una casona de más de 100 años de antigüedad, cuyos muros proporcionan la escenografía ideal para la exposición de pequeños esqueletos, peculiares por sus vestimentas. La colección en exhibición permanente es de 60 figuras de diversos tamaños y diseños únicos. El Museo de la Katrina ofrece a sus visitantes un recorrido en el que se conocen y recuerdan algunos personajes de leyenda, de la vida de México y del Saltillo antiguo, las costumbres y tradiciones.
La calacas de papel maché evocan personajes como la matrona que regenteaba a las mujeres de la vida galante, mejor conocida como “La Tía de las Muchachas”; las emparedadas, mujeres que fueron enterradas vivas en época del Santo Oficio por embarazarse antes del matrimonio; María La Roja, Fufurufa y personajes típicos de burdeles y pulquerías.
Por su carácter único a nivel mundial, el MUKAT es uno de los principales atractivos turísticos del estado. El recinto cuenta, además, con una biblioteca y videoteca especializadas en la tradición del Día de Muertos y un pasillo de exposiciones temporales.