Susana Cappello, Carolina Baigorri y Victoria Roca son las tres jóvenes empresarias detrás de Smarts Straw, un popote inteligente que detecta estupefacientes en las bebidas alteradas con intenciones de drogar a mujeres víctimas de una violación sexual.
Ellas crearon esta idea desde que estudiaron en una escuela preparatoria en Miami, Florida, pero su proyecto en las búsqueda de fondos a través de crowdfunding para obtener la patente y vender miles de estos productos a los Estados Unidos.
En su página de internet se puede leer que las tres tienen amigas que sobrevivieron a distintas agresiones sexuales, la mayoría después de tomar bebidas adulteradas. Por lo tanto, sintieron la necesidad de mezclar tecnología con la sencillez de un popote para prevenir de estos constantes ataques en bares y centros nocturnos contra las mujeres.
Fue en mayo del presente año que presentaron Smart Straws en un panel de empresarios expertos, el concurso lo organizó el diario Miami Herald, donde compitieron contra más de 300 emprendedores de Florida y obtuvieron el primer lugar.
Su proyecto se publicó en distintos medios y alcanzó más de 13 millones de visitas en redes sociales en pocos meses. Actualmente realizaron diversas actualizaciones al aparato tecnológico que detecta sustancias químicas y alertar a las usuarias cuando toman una bebida alterada que podría drogarlas. Las consecuencias pueden variar desde una violación hasta un feminicidio.
El popote literalmente cambia de color cuando detecta algún tipo de droga, como pequeños trozos de rohypnol, ácido gamma-hidroxibutírico (GHB) y ketamina, tres de las sustancias que más usan los agresores sexuales en los centros nocturnos para producir un desmayo o alucinaciones en las víctimas. El plástico se ilumina de color azul marino cuando entra en contacto con alguna sustancia química en la bebida alcohólica o no alcohólica.
* Foto: Vogue.
Según Cappello, este popote inteligente previene a las mujeres antes de una violación. «Queremos ayudar a las personas a sentirse seguras y que tengan el conocimiento de lo que están bebiendo es seguro. También queremos tener un impacto social en todo el mundo». Roca agregó que su producto podría salvar la vida de muchas mujeres. «La pajilla fue creada para salvar a las personas antes de una tragedia, pero también es para concientizar de un importante problema mundial».
En Estados Unidos, cada 98 segundos una mujer es agredida sexualmente, sin embargo, las mujeres jóvenes son las más propensas sufrir algún tipo de intento de violación. La mayoría de estos casos se presentan cuando un agresor mezcla en la bebida de su víctima algún tipo de droga, según datos de la organización RAINN.
* Foto: Facebook.
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