¿Qué es lo peor que tus ojos han visto?
¿Se parece a esto?
Estas imágenes son de algunas de las películas más trastornadas de la historia del cine (dirigidas por mentes macabras como las de Takashi Miike o Ruggero Deodato), las cuales destacaron por su uso innecesario de la violencia, elemento que siempre ha estado presente en la historia del séptimo arte, aunque quizá no con tanta fuerza como en los más recientes años.
A los nombres anteriormente mencionados hay que añadir el del realizador danés Lars von Trier, cuyas películas siempre han estado en el ojo del huracán debido al shock que generan tanto por sus relatos como por la manera gráfica en que son expuestas.
El creador de películas como Dogville, Antichrist o Nymphomania, ha vuelto a generar fuertes polémicas con su más reciente producción, The House That Jack Built, en el más reciente festival de Cannes, misma que marcó su regreso luego de ser vetado en 2011 por emitir comentarios a favor del dictador alemán Adolf Hitler.
Su regreso, como era de esperarse, no ha dejado indiferente a nadie: su nueva cinta provocó horror, asco y repudio que muchos espectadores han manifestado vía redes sociales. “Desagradable”, “vomitiva” y “vil” han sido calificativos recurrentes para describir The House That Jack Built, la cual causó que cien personas salieran de la sala en shock antes de que la proyección culminara.
El periodista Roger Friedman expresó que el trabajo de von Trier es “una película infame. No se debería haber hecho. Los actores también son culpables”.
https://www.youtube.com/watch?v=Ps5hdCqo-bA
En The House That Jack Built seguimos la vida de Jack, un arquitecto y asesino en serie durante la década de 1960 y 1970 en el estado de Washington, que se dedica a celebrar festines de sangre en contra de mujeres y menores de edad.
Jack es interpretado por el gran Matt Dillon, uno de los mejores actores de su generación, quien encarna a una criatura de piel humana que aloja en su interior a un depredador ansioso de muerte. Dillon demuestra su capacidad de escudriñar en su propio ser para sacar la parte más oscura que habita en él, algo que el propio von Trier ha querido mostrar en esta obra, donde el mal es el eje conductor de todo.
El problema de The House That Jack Built es su normalización de la violencia para crear una especie de reflexión social en torno a la misma. Se vislumbra un afán de situar a las mujeres como las víctimas perfectas de un serial killer y de reflejar la debilidad de las minorías (el tráiler muestra a un grupo de personas de raza negra siendo torturados por Jack). En momentos en que la violencia se deja sentir de múltiples maneras a lo largo y ancho del mundo (amenazas nucleares, atentados terroristas, linchamientos, feminicidios, violaciones, etcétera), el cuestionamiento sobre si este tipo de cintas son necesarias surge de manera natural.
Lars Von Trier nunca ha parecido sentirse molesto en el papel del director misógino que tantas veces se la ha achacado a lo largo de su trayectoria.
Las noticias cuentan que el regreso del realizador danés a territorio francés fue con una emotiva ovación de pie, misma que se fue transformando en horror conforme la película avanzaba. Los crímenes del personaje de Dillon son descritos como espantosos y excesivos. Es cierto que para abordar el tema del mal no es necesario presentarlo con todo lujo de detalles. Pareciera que el objetivo último de Lars Von Trier sería provocar el shock por el simple placer de hacerlo.
Pese a tener otro estilo y otro ritmo, The House That Jack Built se emparenta con cintas slasher como American Psycho o Maniac, donde la violencia y el trato hacia las mujeres llegan a volverse innecesarios, a pesar de querer justificarse con las alucinaciones de los personajes o sus problemas del pasado.
Matt Dillon, en compañía de otros destacados actores como Bruno Ganz y Uma Thurman, se destaca por una actuación acertada que al mismo tiempo palidece por lo controvertido que se vuelve. Von Trier gusta de llevar a sus actores por una senda misteriosa y aterradora que ha fascinado a gente de la talla de Charlotte Gainsbourg, Kirsten Dunst, Björk, Nicole Kidman o Willem Dafoe.
Hay límites que son peligrosos cruzar y toda persona que tiene la libertad de crear también carga con la responsabilidad del contenido de su obra. Podemos estar de acuerdo o no en que la imaginación también debería tener una autocensura, pero es un hecho que von Trier nunca ha prestado caso a que en el afán de no quedarse callado también puede lastimar a personas susceptibles.
De temas tan delicados como el infanticidio o la misoginia ya tenemos más que suficiente con los periódicos que se venden en las calles todos los días.
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Los que permanecieron en la sala hasta el final de The House That Jack Built ofrecieron seis minutos de aplausos para Von Trier, cuestión que nos revela que el mundo posee matices donde unos aman lo que otros repudian y viceversa. Esta nueva historia, que aún no tiene definida una fecha de estreno, nos lleva a dar un repaso por los filmes más controvertidos de todos los tiempos, que representan un reto para los estómagos fuertes y las mentes equilibradas o para los que sólo tienen hielo en las venas y nada les perturba.
Aún no existen fechas de estreno en Latinoamérica, pero se espera que llegue en otoño de este año.
