Alguna vez escuché a una amiga decir que jamás se haría una perforación en el ombligo porque es el centro de su cuerpo y hacerlo implicaría una ruptura en su equilibrio; tenía razón. Las perforaciones han tenido distintas connotaciones desde tiempos antiguos hasta nuestros días. Antes, representaban rituales para culturas africanas o mayas y tenían una íntima relación con la energía.
Después se convirtieron en un símbolo que identificaba a ciertos grupos sociales: las mujeres las utilizaban para lucir más atractivas. En épocas más recientes, los homosexuales los utilizaban en la oreja derecha para distinguirse de los demás, pero gracias a la apertura actual, ya no es significativo ese uso referencial.
Una perforación es mucho más atractiva que un tatuaje, es más íntima, se vuelve una extensión del cuerpo y es una manera de explotar al máximo la belleza humana. Además, lucen muy sensuales en ciertas zonas del cuerpo y en otras, presumen mejorar la experiencia sexual.
En cualquier lugar, un piercing representa múltiples repercusiones que debes considerar previamente. Estos consejos te ayudarán a estar preparado y no arrepentirte después. Tómalos en cuenta.
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Dónde duele más
Perforarte es muy doloroso en cualquier parte del cuerpo, sin embargo, algunas zonas son menos difíciles para decorarlo. Entre las partes que más causan dolor están la nariz, el cartílago, los pezones y obviamente los genitales; sí, las zonas más recurrentes para ponerte una perforación, pero te tenemos una buena noticia: puedes hacerte una en el lóbulo de la oreja, el labio inferior y en la lengua sin problema, pues hay menos terminaciones nerviosas. Si pensabas hacerte uno en el ombligo, no te aseguramos nada, el dolor depende de cada cuerpo.
[ Perforaciones en la oreja que le darán el toque perfecto que le falta a tu look ]
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Cuidados extra
Los cuidados que debas tomar también varían, pero en general debes mantener impecable la zona; lava continuamente con jabón neutro para evitar infecciones. Si te hiciste una perforación en el labio o la lengua debes considerar no consumir alimentos picantes en un largo periodo, procurar no mover el piercing y lavarlo, pues la boca es un gran foco de infección.
Tipos de pieza
Debes considerar el material del perno porque estará dentro de tu cuerpo y puede causar alergias si no es el adecuado. Los más recomendables son de acero inoxidable quirúrgico con niobio y titanio porque son hipoalergénicos y no causan repercusiones futuras, aunque también puedes usar de platino y paladio. Debes tener mucho cuidado con los de oro porque generalmente están combinados con otros metales y tu cuerpo puede reaccionar de distintas maneras.
Mejores lugares para hacerlo
Jamás lo hagas en un lugar muy barato o con tu amigo “el que perforó a todos”. Lo básico que debes saber para elegir un buen sitio es que tenga los requisitos sanitarios mínimos, permisos a la vista y que esterilice adecuadamente los materiales o bien, que sean desechables. Hay muchos lugares que te ofrecen múltiples opciones y consultas posteriores en caso de que tengas molestias.
Consecuencias futuras
Aunque te cuides al extremo, hay muchas situaciones desafortunadas que pueden ocurrir con un piercing. Por ejemplo, si tienes uno en los genitales es importante considerar que en una relación sexual se puede romper el condón o podrías lastimar a tu pareja; si tienes uno en el ombligo es muy fácil que se atore con la ropa o con cualquier mueble y rasgar tu piel.
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Considera el tiempo de recuperación
Una perforación requiere más tiempo de recuperación que un tatuaje, pues implica perforar un nivel más profundo de la piel. No podrás exponerla al sol, por lo que si pensabas ir a la playa con el piercing que te hiciste hace un mes, olvídalo.
Preparación previa
En primer lugar, debes tener todas tus vacunas porque tendrás contacto directo con materiales ferrosos. Pregunta qué tienes que hacer antes de llegar, pero lo más importante es mantener sana la zona que será la elegida para la perforación, ya que si tiene quemaduras o irritaciones, pueden empeorar. Es mejor esperar una semana o dos a que se recupere para regresar por tu nueva perforación.
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Pocos se atreven a perforarse, pero los resultados son mágicos y hermosos. No te preocupes por desequilibrar tu cuerpo o energía, un piercing debe ser únicamente para ti porque representa un contacto directo con tu ser y transforman tu cuerpo, mateniendo tu esencia. Pueden ser simbólicos, sexys y con algún fin en especial. Disfrútalo y considera todo lo que implica para que al final no te arrepientas.
