Hay miedos y deseos que crees que jamás sentirías. Estás seguro de conocerte y saber todo de ti; sin embargo, sólo te permites mirar una parte: la que la sociedad te ha dicho que es correcta. Todo lo “malo”, lo vergonzoso, lo reprobable, lo has escondido en el baúl de lo inconsciente sin sospechar que está vivo y esperando el momento de salir.
Cuando dormimos, las estructuras mentales que separan y juzgan el “bien” y el “mal”, se relajan, bajan la guardia y permiten que lo reprimido haga su aparición en el escenario de los sueños. La materia prima de las pesadillas más perturbadoras son aspectos de nuestra personalidad que desconocemos o negamos. Se nos presentan a través de símbolos, algunos guardan un significado personal y propio; pero, de acuerdo a la teoría psicoanalítica, hay una simbología común en todos los que compartimos una cultura. Si has tenido alguna de las siguientes pesadillas, quizá te enteres de algunas verdades sobre ti mismo:
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Se te caen los dientes o el cabello
Los dientes y el cabello son parte fundamental de la imagen con la que nos presentamos ante los demás. Perderlos es indicador de que nos sentimos oprimidos, inseguros y temerosos de cómo es percibida públicamente la persona que creemos ser.
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Accidentes en auto o avión
Desde la teoría psicoanalítica, los movimientos rítmicos y fuertes, por ejemplo, una pelea, choques o atropellamientos son una representación simbólica del sexo. En términos coloquiales significa que sientes deseos de una buena sacudida.
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Que intentas salvar a alguien… y fallas
A nivel consciente puede que afirmes que no te gustaría tener hijos, pero las pesadillas en las que intentas rescatar a alguien revelan un enorme deseo de cuidar y proteger a un ser más vulnerable. En el fondo anhelas que alguien necesite de ti.
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Tienes que hacer un examen y sabes que vas a reprobar
Soñamos con exámenes cuando sentimos que hay una gran responsabilidad sobre nosotros y no nos sentimos preparados para afrontarla. Por fuera, eres un adulto que sobrelleva la vida, por dentro, sigues siendo el niño tímido que le tenía miedo a la maestra de matemáticas.
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Caes por un precipicio
Según el psicoanálisis, los sueños de caídas tienen dos interpretaciones. Por una parte, es un deseo de ser levantado y mimado, igual que lo hacían tus padres si tropezabas cuando eras niño. También representan ganas intensas de entregarte a tus pasiones, de dejarte caer ante lo prohibido y permitir que te destruya.
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La muerte de un ser querido
Éste es uno de los símbolos más literales. Aunque tal vez nunca lo admitirías, soñar con esto es la manifestación de tus deseos porque esa persona desaparezca. Esto puede surgir por celos o rivalidad actuales o, lo más común, por un conflicto en la infancia que nunca resolvimos y hasta hoy se nos presenta.
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Estás desnudo y expuesto
La desnudez es la faceta más humana y natural del “yo”. Es el estado en el que no puedes esconderte detrás de la censura y los valores que nos ha impuesto la sociedad. Si te sientes ridiculizado y humillado en tu sueño, es porque temes ser juzgado y excluido por mostrarte tal cual eres.
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Tu ex regresa
Seguro estás pensando que la interpretación más obvia es que lo extrañas. Sin embargo, también podría representar la necesidad que sientes por cerrar un ciclo y adaptarte a nuevas etapas de tu vida.
La próxima vez que tengas una pesadilla, pregúntate qué aspectos de ti mismo te estás aferrando a negar; pero, te lo advertimos, si miras hacia dentro puedes encontrar cosas perturbadoras, ¿te atreverías a hacerlo?
Si eres de los que les encanta experimentar otras dimensiones del miedo, no dejes de ver Hotel Victoria: La Serie en nuestro canal de Facebook todos los días, el lugar donde tus peores pesadillas se hacen realidad.