Para la comunidad gay ya no estamos en 1920. Afortunadamente, por supuesto. Es más, qué decimos 1920; con mencionar nuestra historia como civilización de hace cuarenta años ya sería suficiente. Con postrar la mirada hoy en cualquier contexto conflictivo de derechos humanos u homofobia ya sería sobrado para notar dos cosas: que el avance ha sido considerable en terrenos de visibilidad y que en términos jurídicos cualquier persona puede jugar un papel significativo ante muchas situaciones. Aunque esto no significa que la lucha esté librada del todo o que los esfuerzos deban relajarse ahora. Eso nunca.
Y a pesar de que estas enunciaciones pretendan ser aliciente o consuelo de lo dura que ha sido esta transición de lo ilegal, lo inmoral y lo perverso –por no mencionar su estadía en el catálogo de las enfermedades del mundo–, no debemos olvidar que en muchos puntos específicos del globo todavía se sigue denigrando a cualquier ser humano cuyas orientaciones sexuales o afectivas resulten extrañas para el grueso de su comunidad, se perpetúa la necedad de no brindarles oportunidad en varios sectores y se cree absurdamente que no pueden gozar de derechos o garantías que en realidad son innegables a cualquier individuo de nuestra especie.
Porque, sí, lamentamos informar a los detractores del matrimonio igualitario, la adopción gay o las familias diversificadas –que no sólo competen a dos hombres o dos mujeres en su conformación, hay todo un abanico de posibilidades que al parecer siguen desconociendo–, el mundo no es heterosexual ni está conformado por reglas inamovibles.
Entonces lo que nos queda, en realidad, es abrir los ojos y entender qué es lo que está sucediendo en el mundo. Las cosas han cambiado y lo seguirán haciendo. No hay mucho qué hacer al respecto más que informarnos de sus sucesos, sus verdades, sus contextos y todo eso que ha permanecido “oculto” y es nuestra responsabilidad. Para ello, los siguientes libros son esenciales en la comprensión urgente de la vida gay, la verídica sexualidad humana y la reconciliación entre humanos en una sociedad diversa.
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Literatura de ficción
Que en conclusión no es del todo ficticia pues retrata aspectos extremadamente reales del mundo que vivimos. Relatos fantásticos del descubrimiento sexual, la incertidumbre juvenil, el escondite, las primeras relaciones, los encuentros y desencuentros entre amigos, las drogas, la prostitución y los centros nocturnos entre otros elementos que han sido escandalizados y disueltos con el tiempo, son el plano principal de estas páginas. Sus letras y sus confesiones son las herramientas perfectas para que abandonemos la supuesta moral vigente y apreciemos de forma mágica otros rostros del amor y las condiciones que les hemos impuesto.
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“Milagro de la rosa” (1946) de Jean Genet
En este libro se cuenta de una manera parcialmente autobiográfica la historia de un hombre que recorrió durante su adolescencia distintos centros de menores o correccionales donde, contra todo lo creído, brotan relaciones amorosas entre los muchachos y escenas de crueldad entremezclada con dulzura.
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“49 goles espectaculares” (2015) de Davide Martini
En el contexto de la edad escolar y las relaciones interpersonales que van de la rudeza a la caricia secreta –a los pensamientos reprimidos– se levanta este relato donde el deseo insaciable y juvenilmente varonil se excita ante el paso de otros hombres o ante la posibilidad de hallar el amor aunque esto signifique ir en contra del mundo.
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“La habitación de Giovanni” (1956) de James Baldwin
Un hombre se muda a París y sostiene una relación amorosa con otro llamado Giovanni. Hasta allí, todo normal y cotidiano. Nada de otra dimensión. Lo que hace extremadamente interesante a este título es que en su época fue una propuesta valiente que luchaba por mostrar los infortunios de la homosexualidad ante el conservadurismo que no permitía la aparición de “los otros” con facilidad.
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“Un hombre soltero” (1964) de Christopher isherwood
Después de la notoriedad ganada con su adaptación cinematográfica en 2009 por Tom Ford, esta novela es aún más exquisita. Narra un día en la vida de George Falconer, profesor e intelectual brillante, quien atraviesa una crisis existencial después de haber perdido a su pareja en un terrible accidente. Lo demás, cada quien tendrá que leerlo e interpretarlo.
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Literatura de No Ficción
Así como podemos extraer información fiel de cuentos, novelas y demás, los textos basados en hechos históricos o investigaciones de un suceso en específico aportan de manera más directa e incluso ruda la situación en que vivimos. La crónica o el archivo documental nos pueden brindar más datos de los que imaginamos.
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“And the Band Played On” (1987) de Randy Shilts
Durante la década de los años 80 se publicó esta joya del universo gay. Un recorrido de vivencias y anécdotas que versan sobre los bares, los antros, las estrellas del espectáculo under, la política y el VIH. Con seguridad, no hay retrato más fidedigno del conflicto cultural entre instituciones y personas que éste.
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“The celluloid Closet: Homosexuality in the Movies” (1981) de Vito Russo
Un análisis minucioso sobre la cinematografía mundial y la aparición de la comunidad LGBT en ella. Con un recuento que comienza en 1920 y termina en 1980, Russo examina todas las posibles personalidades que se la ha dado a estos personajes en los filmes comerciales: debilidad, depredación y monstruosidad son los principales arquetipos en su listado.
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“Just kids” (2010) de Patti Smith
Una obra maestra de la autobiografía. La ama y señora del punk neoyorkino cuenta en estas líneas su paso por el universo de la música y el amor junto a Robert Mapplethorpe, un hombre que le significó vida y pérdida. Narrando los altibajos, las rupturas y las reconciliaciones que tuvo con este artista queer, Smith enfatiza ese camino tortuoso y lleno de enseñanzas que ambos emprendieron cuando el se enteró que estaba contagiado de VIH. El final todos lo sabemos, pero poco conocemos las travesías en el medio.
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“Cruising Utopia: The Then and There of Queer Futurity” (2009) de José Esteban Muñoz
Si de teoría queer se trata y necesitamos un texto que critique con seriedad sobre el tema, basta con tomar este título y aprender. Aprender mucho. Quizá absorber toda la información que arroja este autor y las propuestas que en sus palabras descansan sea en extremo complicado, pero nada imposible si de verdad se quiere reestructurar nuestro pensamiento.
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Leer sobre amor significa indagar en todas sus posibilidades. No cerrar los ojos ante lo ineludible o lo incuestionable. En México, por ejemplo, es necesario que continuemos por estos caminos de exploración, tolerancia y empatía; poco a poco hemos demostrado nuestra enorme capacidad humana de aceptar la felicidad de los demás, aún cuando eso se siga de otros frenos conservadores por miedo al cambio.