«Es lo mismo con estas chicas del suicidio llamándome», dice en una línea el oscuro autor Chuck Palahniuk sobre su obra “Survivor”. Años después esa línea serviría para inspirar a las Suicide Girls, la comunidad web dedicada a la adoración de las bellezas «alternativas». Mientras que el mundo se fascina con la magnificencia tradicional de las descendientes de Marilyn Monroe, un segmento específico se inclina por físicos que resaltan; no por los estándares de finura establecidos en el pasado, sino por la revolución cultural que nos hace encontrar el encanto en los elementos más extraños, los que vuelven a una mujer diferente a las demás.
Alguien que representa de manera apropiada esa particular visión de la belleza, utilizando elementos culturales y sociales en su obra, es Rik Lee, un ilustrador que ha trabajado con distintas marcas como Ray Ban, Nylon y Mister Simple. La pasión de Lee radica en mostrar el esplendor femenino como él lo conoció: dentro de las subculturas punk que influenciaron a las Suicide Girls.
«Quiero representar personas diferentes, expresando la belleza de la diversidad».
«Siempre he estado fascinado por cómo un individuo puede expresarse –su personalidad y gustos– a través de su estilo. Ya sea en su vestimenta, cabello, maquillaje, postura, lenguaje corporal o una expresión facial».
Rik Lee es un compilador de esencias: su poder de observación y memoria le permiten trasladar sus pensamientos hacia obras sencillas que, dentro de sus detalles, revelan cierta complejidad. El artista integra elementos de pin-up, punk, mitología asiática antigua y detalles de la cultura occidental para crear personajes extraños que no parecen lejanos a nuestra realidad. Mientras que las descendientes de Marilyn Monroe (como las hemos denominado) parecen imposibles de mirar en nuestra vida, las mujeres de Rik Lee sintetizan nuestro entorno contemporáneo. Nos recuerda los graffitis de las calles, el arte antiguo que investigamos por Internet y la fortaleza del género femenino.
«Al igual que las Suicide Girls, mis dibujos representan mujeres fuertes y alternativas. […]Trato de dibujar mujeres fuertes que también tengan un sentido distintivo de su personalidad y estilo».
«Crecí patinando, escuchando punk rock. Estas subculturas han influenciado mi vida y trabajo. Comencé a dibujarles tatuajes a las mujeres sólo por el hecho de que me gustaban los tatuajes. No me pude resistir a llenar de tatuajes cualquier pedazo de piel. Sentí que fortalecía su carácter».
El elemento que más resalta en el trabajo de Lee, como él lo menciona, son los tatuajes y la violencia que muestran sus dibujos. Las expresiones de sus mujeres rara vez son inocentes o banales. Sus ojos, rasgos y ropas tienen detalles amenazadores que resultan llamativos. El autor se inspira en sus épocas como fanático del punk rock y en sus imágenes deja ver ese cambio entre el arte antiguo y esta nueva visión de la belleza. Muestra de forma tácita el cambio de ideología de aquellas chicas que no están rodeadas de brillo o glamur, sino de piezas que están relacionadas con el atrevimiento femenino, con la rudeza que implican los tatuajes (por su bagaje cultural) y con la sensualidad del pin-up.
«A menudo la gente me escribe porque sienten que tienen una conexión con alguna dama que haya dibujado. Quizá les recuerda a ellas mismas, a una amiga, a un estado de ánimo, a un momento o a una etapa de sus vidas. Para mi es genial. Quiero celebrar la diversidad y la individualidad en mi trabajo».
Otro elemento que Lee plasma en esta serie ilustrativa es su concepción de la individualidad: el elemento más característico de nuestra generación. Su estilo no se reduce a crear una visión atractiva de lo alternativo, sino a crear diseños únicos. Él lo describe como un proceso constante en el que su trabajo se va descubriendo conforme avanza. Las personas descubren su identidad tomando como base el ejemplo de generaciones pasadas, o bien, de diferentes movimientos artísticos y culturales. Por ese motivo resulta tan llamativo su trabajo, pues aunque parece semejarse a una moda contemporánea, éste incluye elementos inesperados o insólitos que acompañan perfectamente a las modelos.
«Cada decisión me lleva a otra serie de decisiones y avanzo de esa forma hasta que un concepto claro se presente por sí mismo. Es divertido porque no sé en qué lugar terminaré o con qué ideas y posibilidades me encontraré mientras trabajo».
Lee no sólo evoca a la perfección ese espíritu revolucionario, también tiene un tacto y fineza únicos para representar esa visión. Su trabajo parece una mezcla entre animación norteamericana, anime, pop art y tintes de expresionismo. Sus escenarios invitan a observar el contexto y sus retratos motivan a analizar qué es lo que caracteriza a cada sujeto. Su manejo del color podría parecer exagerado, pero muestra justamente el espíritu alternativo que desea representar. Nos sentimos radiantes en nuestra imaginación y Lee vuelve tangible esa fantasía.
Las Suicide Girls representan la alternativa ante un mundo superficial acostumbrado a las tradiciones de la estética. La obra de Lee no representa sólo a las mujeres que siguen esta moda, sino a todo un movimiento contracultural que afirma que la belleza es diferente y cambiante. Lo que en algún momento parecía extraño ahora es atractivo, así que cada quien crea su propia personalidad a partir de su entorno y su bagaje cultural; todos encuentran su propia magnificencia para encontrar su identidad. Entonces es como escribió Jonathan Safran Foer: «Todo está iluminado por la luz del pasado», y, en efecto, todos nosotros estamos iluminados.
**
Agradecimientos especiales a Rik Lee por le entrevista exclusiva para Cultura Colectiva.
Mira más del trabajo del autor en su sitio web:
RikLee.net